Hay encargos que te gustan hacer porque tienen un valor sentimental muy grande para quién te lo pide, este mantel es uno de ellos.
Concha me pidió terminar este mantel que su tía abuela comenzó hace unos años pero que al fallecer quedó olvidado en una bolsa.
A ella le hacía mucha ilusión verlo completo y aquí está.
Fueron 3 meses de trabajo y empleando el ganchillo de 0.75mm.
Al principio usé el ganchillo de 0.90mm pero me dí cuenta que la tensión no era correcta y cambié al de 0.75mm y así logré igualarla.
El tamaño final resultó mucho más grande del que indicaba el patrón ya que el hilo que habían elegido era más gordo.
Y esta es una lección para todas mis alumnas, es fundamental elegir el material y ganchillo adecuado para cada labor. Y por más que no sea siempre divertido, hacer una muestra es importante.
El abrazo de Concha al entregárselo no tiene precio...
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